El pasado 4 de marzo de 2025, Estados Unidos impuso un arancel del 25 % a las exportaciones provenientes de Canadá y México. No obstante, el presidente Donald Trump anunció la suspensión de estos aranceles para todos los bienes ingresados bajo el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC). Además, concedió una exención temporal de un mes a tres grandes fabricantes automotrices con sede en en EE. UU.: Ford, General Motors y Stellantis.
Ante la entrada en vigor de las nuevas medidas de Estados Unidos, Canadá respondió con la imposición de aranceles del 25% a bienes estadounidenses por un valor de 30 mil millones de dólares y advirtió que, en un plazo de 21 días, extendería estos aranceles a otros 120 mil millones de dólares. Paralelamente, el gobierno canadiense presentó una demanda ante la Organización Mundial del Comercio (OMC), argumentando que las medidas de Estados Unidos constituyen barreras comerciales injustificadas.
Por su parte, el presidente Trump expresó su intención de imponer nuevos aranceles a productos lácteos y de madera de origen canadiense. En el caso de los productos lácteos, prometió un arancel recíproco del 250%.
Siguiendo la política comercial de su país, la provincia de Ontario anunció un arancel del 25% para las entidades estadounidenses que importaran electricidad. Sin embargo, la medida fue suspendida tras la amenaza de Trump de imponer un arancel del 50% sobre el acero y el aluminio canadienses.
Fuentes: