Según la encuesta publicada por el U.S. – China Business Council (USCBC), si bien la mayoría de las empresas estadounidenses instaladas en China se declaran conformes con la Fase I del acuerdo firmado el mes pasado, más de la mitad aseguran que es muy pronto para saber si el acuerdo servirá para recuperar los costos de los aranceles impuestos por la sección 301.
Setenta y ocho por ciento de los miembros del USCBC ven positivamente la Fase I del acuerdo que entró en vigencia el viernes 14 de febrero. De ese porcentaje, el 64 por ciento apoya el acuerdo porque “marca el cese de la escalada arancelaria y hace más sostenible la relación entre los dos países”. El otro 17% afirma que el acuerdo resuelve problemas específicos de su empresa.
Por otra parte, 12 por ciento de no apoya la firma del acuerdo pues consideran que no es una solución en el largo plazo y muchos aranceles siguen en firme. De acuerdo con los cálculos del USCBC, se estima que el 89% de los aranceles de la Sección 301 no se modificarán en la Fase I del acuerdo. “Podemos afirmar que las empresas de manufactura están menos contentas con el acuerdo que las empresas de servicios” concluye Craig Allen, Presidente del USCBC.
En cuanto a los compromisos adquiridos, 30% de los miembros de este grupo ven el aumento de las compras de China como clave para su compañía, 27% resaltaron las protecciones a la propiedad intelectual y 15% consideran relevantes los compromisos frente a la trasferencia de tecnología.
Acerca del acuerdo de solución de diferencias, una quinta parte de los miembros aseguró que utilizaría este nuevo mecanismo, mientras que el 30% no contempla esa posibilidad y el 48% restante está indeciso al respecto. “Es un mecanismo nuevo y es razonable que las empresas quieran ver cómo funciona antes de usarla” dijo Craig quien además cree que esta primera fase del acuerdo ayudará a impulsar una reforma interna en China, en particular en temas de propiedad intelectual.
Finalmente, Craig considera que la aparición del coronavirus en China no afectará la implementación del acuerdo, pero sí podrá atrasar el inicio de las negociaciones de la Fase II.
Fuente: Inside Trade